El Polisario libra sus mercenarios al Mujao por 600 euros al mes

No hay humo sin fuego. Malí, que estaba bajo la influencia del régimen argelino en la guerra contra las redes de Al Qaeda en el Sahel, ha confirmado una vez más la presencia de elementos del Polisario, reclutados como mercenarios en las filas de los grupos terroristas que controlan Malí antes de la intervención militar francesa.
Ministro de Relaciones Exteriores de Malí, Tieman Coulibaly, reafirmó el pasado viernes en Nueva York, la presencia de elementos armadosproveniéntes de los campamentos de Tinduf, en el seno del Movimiento por la singularidad y la Yihad en África Occidental ( Mujao).
Los elementos llegados de los «campamentos de Tinduf han sido identificados dentro de las fuerzas yihadistas» que operan en el norte de Mali, dijo el ministro de Relaciones Exteriores de Malí en el marco de sus conversaciones en Nueva York con responsables de alto rango de la Naciones Unidas.
«Sabemos que los reclutamientos se realizaron» en la región para «alimentar las filas de los criminales del MUJAO» mediante «salarios que oscilan entre 200 y 600 euros al mes, dependiendo de las circunstancias y situaciones», dijo el ministro Malíénse . Esto explica estas infiltraciones en territorio maliénse, por «la porosidad de nuestras fronteras, que son muy largas y difíciles de controlar».

Los combatientes que llegan voluntarios se sienten atraídos por las generosas retribuciones financieras que les ofrecen las redes de reclutamiento al servicio de grupos terroristas.
Tieman Coulibaly advirtió sobre los riesgos de desestabilización que enfrenta la región, asegurando que «lo que ocurre en Malí (aunque) situado (…) es en realidad una amenaza que se dirige» a toda la región e incluso «más allá del Mediterráneo».
Cuando se sabe que el 70% de los jóvenes saharauis viven ociosos y desempleados en la desesperación total en los campamentos de Tinduf, la suma de 600 euros es vista como un regalo del cielo. La mayoría de estos jóvenes, según un experto americano que ha largamente viajado por la región, no se hacen de rogar y son fáciles de ceder a la tentación, si encuentran una manera de escapar de su campamento para unirse al frente de Malí, donde son inmediatamente enrolados por uno de los grupos terroristas.

 

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