El giro de los graves acontecimientos en Malí dicta una necesidad urgente de resolver la cuestión del Sahara Occidental para evitar la quema de la África subsahariana del Sahel. Para los expertos, Malí es ahora una de las principales preocupaciones después de que Libia, donde la rebelion armada contra el viejo régimen dio rienda suelta a la entrada de armas en el Sahel, que se extiende desde Libia a Mauritania, pasando por Chad, Níger y el sur de Argelia. Agravado por la participación de la rebelión tuareg y de los yihadistas de AQMI del grupo salafista de Ansar Dine y de Mujoa, la crisis en Malí, se suma a la urgencia de encontrar una solución definitiva al conflicto del Sahara, que llega a raíz de los cambios que conoce la región, dijo Peter Pham, director del centro Michael S. Ansari para África que releva del think tank USen el marco del Consejo Atlántico. «El problema de seguridad es aún mayor que la colusión entre los elementos de AQMI y el Frente Polisario se basa en consideraciones pragmáticas, más que por los imperativos de cualquier pureza ideológica», señaló el expertoamericano, durante una conferencia el 3 de abril en Washington, por el Moroccan American Center for Policy (MACP).
Peter Pham, experto y autor de varios ensayos sobre los conflictos en África y Al-Qaeda, dijo que AQMI ha siempre hecho un uso de «combatientes entrenados» del Polisario para asegurar el éxito de sus operaciones de toma de rehenes y de peticion de rescate dirigido específicamente a los ciudadanos occidentales. Citó entre otros, el caso de un ex mando del Polisario Omar Ould Sid Ahmed Ould Hama, alias ‘Omar Saharaui «, que se unió a las filas de AQMI y ha contribuido a los secuestros en el Sahel. También recordó el caso de los dos cooperantes españoles y un italiana secuestrados en octubre pasado, en el corazón de los campamentos de Tinduf, con la clara complicidad de los miembros del Polisario. «Este nuevo modus operandi se esta demostrando en el norte de Malí, donde banderas negras de al-Qaida flotan en las ciudades de Gao y de Tombuctú», advirtió. AQMI y otras nebulosas terroristas estàn en vias de fortalecer sus bases de retaguardia en el Sahel especialmente en el limite de las fronteras entre Malí y Argelia, donde se enviaron grandes cantidades de armas del arsenal de armas de Libia.