Es una situacion que el mundo parece olvidar, aquella de 90.000 Saharauiés viviendo en los campamentos de Tinduf, estrechamente controlados por el Frente Polisario y el ejercito Argelino.Privados de su libertad de movimiento, de la libertad de reunion y de asociacion, y sometidos a estrictos y severos controles diarios, los saharauiés secuestrados en Tinduf estàn amenazados por un nuevo mal, insidioso : El olvido. Mientràs que su pais de origen, Marruecos que tàn solo se encuentra a escasos decenas de kilometros, los saharauiés viviendo en los campamentos cuadrados por la guerrilla del Frente Polisario no pueden pretender a ejercer sus derecho al retorno, derecho garantizado por la carta internacional de los derechos humanos. La causa de ésta situacion màs allà del limite ? Estrategias de poder, y una voluntad de dominacion del Maghreb por Argelia, que envenena la situacion politica del Africa del norte desde hace cerca de 34 años.
En efecto, éste conflicto, ultimo sobresalto de la guerra fria, debe ser manifestada en la portada de los estragos humanos que causa cada dia, y de los dramas familiares que son el resultado de la suma. Familias separadas, niños reclutados para ser aprendiz soldado a partir de los 12 años, cuando no son enviados a los « campamentos de instruccion ideologica » en Cuba, la comunidad internacional, que se emociona ràpidamente cuando se trata de las FARC Colombiana, debe rendirse cuenta que su similar norte africano, el Frente Polisario, es igualmente un movimiento que siembra el terror, y gestiona a màs de 90.000 rehénes.